–Es un buen momento para que leas Flash – me avisó uno de los gurús barbudos – Ha perdido la memoria y empieza de cero.
El reseteo de Flash era una gran oportunidad. ¡Con lo que me gustaba Flash, con su traje rojo, su rayo amarillo y lo que yo pensaba que eran unas simpáticas orejillas. ¡Si hasta tengo un pijama suyo! Bueno, a todo lo llaman pijama porque en realidad es una camiseta y un microminipantalón que…
–¿De cuál?
–¿De cuál qué? – pregunté. Sí que les gusta hablar de pijamas a los lectores de superhéroes…
–¿Que de qué Flash es tu pijama?
Euh. Y es que, menuda sorpresa, resulta que hay varios Flash. El más antiguo es uno que lleva una bacineta quijotesca en la cabeza y que inhaló unos efluvios tóxicos; el de mi pijama es Barry Allen, un policía científico a quien le cayeron unos potingues encima; y finalmente, su sobrino, Wally West, primer Kid Flash y tercer Flash, que también se accidentó con mejunjes. Una casta de záforas que ha dado como resultado tres velocistas. Ahí es nada. Una se acostumbra al monoteísmo sencillito, a que haya un sólo Superman y un único Batman, y, de repente, te encuentras con una genealogía de Flashes que ni Santa Bárbara.
El Flash que ha reseteado Geoff Johns es Wally West, un mecánico de la policía. Qué poco glamour. ¿Dónde han quedado los fotógrafos, los asquerosamente ricos, los periodistas, los abogados y los profesionales liberales en general? Algo decepcionada, empecé a leer el primer número. Digo decepcionada porque no era el Flash clásico, ni tan siquiera un segundón, qué coño, ni el de mi pijama, sino un Flash de tercera división. Pero ¿quién puede resistirse a leer de gorra un tebeo de superhéroes que parte de cero? Bueno, que parte de cero es un decir, porque si bien es cierto que Wally West y todos los que conocen la identidad de Flash han perdido la memoria, la recuperan a marchas forzadas. Desde la aparición del sobrino-nieto (o lo que sea)desde el futuro, aquello se convierte en el habitual batiburrillo de DC: venga superhéroes de toda la vida pidiendo explicaciones y midiéndose los genitales por aquí, venga villanos, de nombre ridículos y a cada cual más estrafalario, atacando por allá.
A estas alturas mi decepción inicial ha quedado muy atrás. Me está gustando mucho este Flash de FP, optimista y luchador, con su curro de medio pelo y su insoportable mujer, que disfruta ayudando a los demás y al que adoran sus vecinos de Keystone City.
Lástima que mi pijama no sea de Wally West.
¡Buen día a todos!
Lord_Pengallan dice
Mira, esto me mola mas. Mucho mejor habalr de pijamas con minuuusculos pantalones que habalr de bragas y viejas y otras del …
Dreebo dice
A ver si acaba saliéndote barba a ti también…
ZalayA dice
Rara la genealogía de Flash, dices… Pidele a tus amigos barbudos y DCeros que te expliquen la de HawkMan y veras… Yo lo cojí con ganas, en serio, pero me pudo.
—-Namarië—-
Pd:”262163″
Mar dice
Pijama con nombre y apellidos, con denominación de origen, certificado de garantía por dos (mínimo) años, sello ISO9000, acta notarial dando fe de lo que es, etiqueta de modos de lavado (¿y planchado?), fotocopia compulsada por el creador y caja reque tepreciosa y no-abollada, de la que conviene no sacarlo, ya que se podría convertir en objeto de culto y no sería lo mismo con las pelotillas propias del roce provovado por las invernales -y antisexis- sábanas de franela…
Eso sí es un pijama-pijamero!!!
Beitos
Chew dice
Que envidia mas mala que tengo…
XCAR dice
¡Ha vuelto la censura al blog de Airu!!!!!
¡A topeeeeeeeeeeeee!!!!!!!!!!
DaniKabuto dice
¡Ja, ja1 Me encanta lo de “un Flash de FP”. ¿Qué estudiaba Peter Parker? ¿Hubiera elegido Religión en la España de la LOCE? Seguramente habría elegido Alternativa a la Religión: eso de “Un gran poder colleva una gran responsabilidad suena a protestante ¿Era tío Ben pastor anglicano? ¿Alguien enseñó Ética al punisher? ¿Benn Grimm tuvo una beca de Rugby? ¿Estudió Silver Surfer a distancia? ¡Dios!