Hago un alto en las fiestas para desearos que paséis unos buenos días.
Como ya sabréis, en Zaragoza estamos en plenas fiestas locales. Ayer tuvo lugar la tradicional ofrenda de flores. Este día, muchos maños se visten de baturros y llevan flores a la Virgen del Pilar. Como no podía ser de otra forma, cuando era pequeña yo también sufrí, en mis carnes morenas y olé, semejante tradición. Ahora la ofrenda de flores parece la pasarela Cibeles, pero antes, sólo había dos modelos de traje de baturra, a cada cual más negruzco: el de jotera y el de dama. El de dama era el caro, el elegante, el que queríamos llevar todas. Pero la parte andaluza de mi árbol familiar se hizo valer y ahí tenéis el resultado…
Iru… ¡Ojazos!
Eso son ojos!! Iru tiene los ojos como me gustan a mi, uno a cada lado de la nariz!!
Tu estilo de dibujo, que por cierto me encanta, está pidiendo a gritos un slice of life. ¡Anímate!
JEJEJE!! que dibujo más chulo!
Pues yo jamás pensé que me pondría de Baturro. Es más, me excojonaba con sólo pensarlo… llegó Marta, y ya llevo dos años…
Pués no sabes la suerte que tienes, el andaluz es mucho más cómodo, con el de baturra tienes que ir subiendo las medias, bajando los calzones, colocando el mántón, sufriendo los pendientes que pesan como losas, recolocando el moño….una tortura, yo siempre me preguntaba como podían las mujeres trabajar o andar simplemente, con todos esos trapos. ¡Vivan los vaqueros!
¿Cuántos años sufrí la ofrenda? Hasta que empecé a salir por la noche y no había quien me levantara el día del Pilar.
No sé que significa exactamente «excojonarse» pero da bastante miedo…
Pues mi señora lleva desde pequeña visitendose de baturrica para la ofrenda, y de momento me he salvado de ir vestido de baturro, aunque de calle todos los años.
Por cierto, que mi familia tambien es de ascendencia andaluza.
Jo, que tramados a plumilla más majicos. Viva la Iru del Pilar!!!