Cuando regalo cómics a personas que no leen cómics intento elegirlos con algo de tino para que no me lo tiren a la cara nada más abrir el paquete. No sé vosotros, pero yo tengo cantidad de amigos y conocidos que no leen cómics o no leen en absoluto porque creen que es «perder la vida». Ahí es nada. Sin embargo, igual que ellos gustan de obsequiarme con vajillas, toallas y demás chorradas, a mí me gusta regalar tebeos. Un poco por venganza al recordar la última ensaladera; otro poco por compartir la afición; otro por aquello de que la esperanza nunca se pierde; y un mucho porque es lo que me gustaría recibir a mí, en lugar de la dichosa ensaladera que ya ni sé cuántas tengo. Lo cierto es que para regalar un cómic a un no-lector no podemos coger el primero que veamos o el que más nos guste a nosotros. Para que el obsequiado no ponga cara de «pero esto qué mierda es» o «a la basura va», el cómic objeto de regalo debe cumplir una serie de requisitos:
La temática tiene que guardar una mínima relación con la edad e intereses del obsequiado. Por mucha gracia que me haga «Todo lo guarra que ella puede ser» (Roberta Gregory) regalárselo a mi madre puede ser una idea poco afortunada y posible causa de desheredación. Ojo, que hay madres y madres. A otras les hará una risa tremenda.
Es mejor que el cómic sea autoconclusivo. Es decir, una historia que empiece y termine en el mismo tomo. No creáis que regalando el primer tomo de Malas Ventas a un escritor en ciernes o el del Señor Jean a un treitantañero con incipiente calvicie, vais a conseguir que compren los siguientes. Más bien lo contrario o con mucha, pero mucha, suerte os gorronearán vuestros tebeos hasta que pierdan completamente el interés.
Fundamental es que el cómic tenga buena pinta. Los lectores de tebeos sabemos que el envoltorio no hace un cómic bueno o malo, más bien lo hace caro o barato. Pero un regalo es un regalo. Y es bien distinto regalar diez grapas chuchurrias que un flamante tomo. Eso lo saben bien los de Astiberri o Sins entido cuyas ediciones son muy regalables y sus precios… pues menos.
Si hablamos de aspecto apetecible, también cuenta el dibujo. Por más que nos guste From Hell, es probable que un no-lector nos mire espeluznado ante semejante regalo aunque le juremos y perjuremos que va de Jack el Destripador y que hasta hicieron una peli en la que salía Johnny Depp. Así que es aconsejable despedirnos del dibujo difícil de ver aunque nos encante Hicksville, la Colino o Thomas Ott.
Por último, la historia. A todos nos gustaría regalar Watchmen o V de Vendetta pero, aunque nos emocione que V le lleve una caja de bombones a la Justicia, que las ideas sean a prueba de balas y blabla, no es un buen regalo para un no-lector. De verdad. El rollo histórico, lo social y el humor siempre enganchan a más al público generalista que los cómics rarunos e inquietantes, las interminables sagas superheroicas o el eslaisoflaif de Jean Pierre comiendo un cruasán en una terraza de Montmartre mirando entretenido las avutardas mientras la que podía ser la mujer de su vida -pero que no lo será porque el destino es caprichoso- coge un taxi y fin.
Aquí van unos cómics que he regalado y no me los han tirado a la cabeza (a diso gracias, porque algunos son unos tochazos tremendos)
1- Maus, de Art Spiegelman.
2 -Persépolis, de Marjane Satrapi.
3 -Píldoras azules, de Frederik Peeters.
4 -Paracuellos, de Carlos Giménez.
5- Palestina, de Joe Sacco.
6- Palomar, de Beto Hernández.
7- La tetería del oso malayo, de David Rubín.
8- Es un pájaro…, de Steven T. Seagle y Teddy Kristiansen.
9 -Arrugas, de Paco Roca.
10 – Ocurrió cerca de tu casa: Sabe Dios, de Carlos Areces.
11 – La mansión de los Pampín, de Miguelanxo Prado.
¿Se os ocurre alguno a vosotros para ampliar la lista? ¿Qué tebeos regaláis a los no-lectores? ¿Os regalan vajilla o sólo yo tengo esa desgracia malditasea?
¡Buen día a todos!
NabLa dice
Buddy y los Bradley. Aunque son dos números si no recuerdo mal, son autosuficientes. Supongo que depende del sentido del humor del que esté al lado recibidor del regalo.
juanvvc dice
– Cualquiera de Taniguchi, especialmente el de la historia del perro y el gato (no recuerdo el título) Para los amantes de la naturaleza, los animales y las historias tranquilas.
– La Espinaca de Yukiko o Mariko Parade, de Boilet, para los simplemente amantes. Durante un tiempo fueron difíciles de encontrar en castellano pero creo que han hecho una nueva edición recopilatoria de limitadísima tirada («Las mujeres de Boilet» o algo parecido). Dos historias de amor muy sensibles y asequibles. Cuidado que incluyen escenas de sexo.
– El Hombre Deseado, de Ralf Konig, risas para los más gamberros. Una vez tuve tanto éxito con éste que después tuve que prestar Pretty Baby e incluso Huevos de Toro. Gusta especialmente a las mujeres. Y a los gays, por supuesto.
– De tu lista me quedo especialmente con Píldoras Azules. No estoy muy de acuerdo con «Es un pájaro…» ni «Maus». Maus no es tan fácil de leer por su longitud y tema, demasiado opuesto de lo que la gente piensa que es un cómic. «Es un pájaro» habla mucho del efecto de Superman sobre los amantes del cómic. Si quieres regalar un superhéroes, creo que «Superman para todas las estaciones» es más adecuado para alguien que tuvo de pequeño interés por los cómics y ahora lo ha perdido. Y a mí me gustó mucho más Gorazde que Palestina, pero ambos son una buena recomendación.
– Stuck Rubber Baby está en el límite. No lo regalaría por su longitud, como Maus, pero merecería también estar al menos mencionado en esta lista.
GoLo dice
Wala! Ya se qué comics comprarme :D. Tks.
el tio berni dice
Yo he probado a regalar o dejar a gente que no lee tebeos los 4 primeros de tu lista y TODOS han funcionado.
Por añadir algo, yo creo que La Balada del Mar Salado o Corto en Siberia también podrían funcionar, aunque no lo he probado. Pyongyang de Delisle, El Archivo Corso de Petillon, el Trazo de Tiza de Prado…
Burbuja dice
Pensaba que no era lectora de tebeos y compruebo emocionada que me he leído de tu lista: Persépolis, Paracuellos,Palestina y Palomar.
He regalado cómics para animar a la gente a leer: La historia de Sudamérica para niños, El Cid, El Quijote….y otros tochos a los que los niños no se acercan si no llevan «santos» jejeje.
Moroboshi dice
Por desgracia, entre mis amigos no lectores de cómics no funciona ninguno. A uno le regalaron «MAUS» y me dijo literalmente que era «una mierda». No «soso», «no me ha acabado de gustar», no… «Una mierda».
A mí me han regalado muchas veces cómics sin saber si me gustarían y siempre han acertado, pero es que yo estoy abierto a todo y la gente que me conoce lo sabe. Me regalaron «Odio» sin saber que yo ya le había echado el ojo, y cojonudo, por poner une ejemplo. Pero a alguien que no lee cómics… yo no le regalaría ninguno.
Eso sí, coincido en lo de que ya basta de toallas y cosas de estas, que tenemos ya un montón. Además, un lector de cómics es el tío más fácil de regalarle algo, no hay que darle vueltas: o le compras algo alabado por la crítica y que acabe de salir y sea caro (así aumentan las posibilidades de que no se lo haya comprado enseguida de salir a la venta) o le pides la lista de los cómics que quiero, que es lo que hacen conmigo. Tú te gastas el dinero igualmente y le haces un regalo verdaderamente útil. Todos contentos.
Yvon dice
Yo tambien suelo recurrir a los comics cuando tengo que hacer un regalo. Con la variedad que hay supongo que es cuestion de saber que comic le va a cada uno. En mi lista tambien estan Maus y Pildoras azules.
Despues otros titulos como Barrio lejano de Taniguchi, Diario azul de Juillard, Por que odio Saturno de Kyle Baker (aunque ahora mismo creo que esta descatalogado), Historia de una rata mala de Talbot, Paul va a trabajar este verano de Rabagliati o el Heroe de Flix.
De entre los superheroes creo que seria bastante regalable el Identidad secreta de Busiek e Immonen.
Dreebo dice
La lista lo deja claro: a los que no leen tebeos les gustan los Cómics de Temas Importantes, a mí nunca me ha fallado. Los que no leen, a secas, son un público mucho más difícil XD Y al que te regala ensaladeras, pues le regalas el Shazam y se la devuelves 🙂
Chacal dice
La próxima vez que te vea te regalo una ensaladera…
No, va, fuera bromas, tienes toda la razón en tu análisis, eso me ha pasado a mi en un par de ocasiones al menos que yo recuerde. El regalo era además para una persona que aunque ahora no es lectora de comics, lo fue de más joven. Y si, hay que decidir bien lo que comprar y basarse en parte en los gustos de esa persona porque como compres cualquier cosa… como que no (en uno de los casos, es muy curioso, fue el Batman Año Uno, desde mi punto de vista una obra magistral pero que a la persona en cuestión no le gustó nada visualmente porque él se había criado con el Batman de Neal Adams y anteriores y el estilo de Mazzucheli (o como se escriba, que ahora no me acuerdo) se le hizo demasiado «rompedor» con el estilo y las clases de comics a los que él estaba acostumbrado.
Rafael Macías dice
ojalá alguien me regalase píldoras azules o Blankets 🙁
moratha dice
yo siempre he regalado los comics de malavida y he quedado como Dios!!
Se han echado unas buenas risas y todos contentos.
un exito
Iru dice
Nabla, como bien dices depende del humor del que recibe el regalo, porque inocente de mí lo he regalado un par de veces y poca gracia ha hecho.
Juanvvc, lo primero gracias por tu aportación, así da gusto. El cómic del perro y el gato imagino que será Tierra de sueños. Me lo regalaron y no sé si fue una putada o qué, porque es un cómic precioso pero bastante tristón. Sobre todo la agonía del perro. Vamos, que yo lo regalaría a amantes de los animales a quienes no se les haya muerto uno recientemente… De Boilet no he leído nada y qué decir de los de König, que tienes razón, gustan muchísimo. Maus, al haber sido premiado con un Pulitzer, pues parece que la gente se lo toma como si fuera un regalo serio. Pasa un poco lo mismo con los de Joe Sacco, que he puesto Palestina pero lo mismo podía haber puesto Gorazde, El mediador… Es un pájaro, como quieras que no, va del miedo a la enfermedad y a la muerte, pues me parece más regalable que uno de Superman a palo seco. 🙂
Golo, pues prepara la cartera, majo 🙂
Tío Berni, cierto es, se me ha olvidado meter a Corto Maltés. Y eso que justamente lo apuntó Nima al hablar del tema, pero como no he regalado ninguno… Creo que pueden gustar mucho por las historias y el dibujo.
Burbu, si es que es verdad, con santos las cosas entran mejor 🙂 ¡¡Tiene que ser un gustazo para tu nena tener una mamá librera!!
Moroboshi, eso pienso yo, que es muy sencillo regalar cosas a los lectores de cómics con la cantidad de novedades que salen y el bosillo pelao que tenemos casi todos… pero parece ser que no. Una pena lo de tu amigo y Maus, pero bueno, para gustos…
Yvon, buen apunte, Historia de una rata mala, Héroe y Di algo (también de Flix) también son cómics muy regalables. No he tenido la oportunidad de regalar estos dos últimos pero pienso que van a gustar mucho. Con los superhéroes no me he atrevido. A veces se me hacen duros a mí, como para ir regalándolos. ¡Gracias por el comentario!
loislain dice
yo soy una no-lectora , que he sido agraciada y regalada con la teteria del oso malayo, y estoy encantada , tanto con el texto como con los dibujos, de hecho lo he nombrado mi mejor comic del año 2007, es que este año ,todavia no ha llegado mi cumple , lalalalalal….
Iru dice
Dreebo, jajajaja, cierto es, los Temas Importantes (así, con mayúsculas) nunca fallan. Shazam! por ensaladera, la ley del talión adaptada a los tebeos 🙂
Chacal, ya verás por dónde te va a caber la ensaladera, nunca lo hubieras imaginado 😀 Tú eres muy superheroico, así que imagino que las cosas que regales irán más por ese camino, ¿no?
Rafael, es tan fácil como cuando alguien duda qué regalarte se lo insinúas como quien no quiere la cosa. A ver si no cómo conseguí mi última caja de acuarelas. ¡La desesperación es lo que tiene!
Moratha, yo también he regalado los cómics de Malavida y unos han gustado mucho y otros pues menos. Pero que la gente viene a comprarlos de propio año tras año es un hecho.
Iru dice
Señorita Lanas, usted ha sido agraciada además de con La tetería del oso malayo, con Píldoras Azules, amén de algún tebeo malavidero 🙂 Y ya veremos qué pasa este año. A lo mejor innovamos y nos damos una vuelta por la planta de menaje del cortinglés 🙂
el tio berni dice
Eso, o Temas Importantes o humor a saco. Dependiendo de a quién, La Parejita de Fontdevila también puede ser un exitazo.
Mar dice
Jo!!!
Llego TAN tarde que te los han dicho todos…
Por eso yo te digo que regales unos cuencos, a juego con la ensaladera que son muy socorridos y siempre en números pares mayores de cuatro y menores de ocho, o su múltiplo por dos, que queda muy British.
Eres un amor y escribes que me caigo de culo!!!
Besitos enormes
Angux dice
Hola a tod@s.
Yo me quedo para regalar con píldoras azules o Blankets, los he dejado a «no lectores de comics» y me ha ido bastante bien.
Pequeños Eclipses también sería una opción a tener en cuenta.
Luego La prorroga de Gibrat y un poco más arriesgado Los combates cotidianos o incluso Murena.
Un saludo.
Va-la-in-gaur dice
Yo… no suelo regalar tebeos. A los que leen, es difícil porque lo que les gusta ya se lo han comprado. Y a los que no leen… para que no lo disfruten, me lo compro yo, y les regalo cualquier cosa más barata, jeje.
Así a bote pronto, la única vez que he regalado un comic a alguien que no lee ha sido a mi hermano, que le regalé un tomo de ‘Bunny suicides’… no tiene texto y es bastante macarrada, así que se ajusta a mi hermano bastante bien…
spiff dice
A mí un tomo de Calvin y Hobbes siempre me ha dado buen resultado. Y llevo ya la tira! 😀
También han funcionado muy bien los de Prado, los de Taniguchi, los Mazmorra, los de Fontdevila (el último tocho sobre ser padre lo regalé hace poco y encantados, oiga) y los de los Hernández.
Con los de Moore ya me he dado un par de batacazos, pero también un buen par de grandes aciertos.
Pero está claro que un Calvin siempre funciona!
NabLa dice
Lo sé… sospecho que si puedes hacer chascarrillos con goatse y tubgirl, las aventuras de Buddy te molarán… A mí me los regalaron hace algunos anios y ya ves, tengo toda la colección bien guardada en una caja hermética de plástico 😉
Oye, y si no, Mortadelo y Filemón eh! Qué habrá sido de los Superhumor!! Como alguien me tache de simple se traga las barbas!
Little Nemo's Kat dice
Sí señora, buena lista. Yo también he probado con algunos de los que mencionas y funcionan bien. Si se tienen pelas (o cierto interés en el/la regalado, los tres tomos de El fotógrafo suelen ser una buena piedra de toque antiescépticos.
Cuando de lo que se trata es de ver caras de estupor o de consolidar la fana de «soy-marciano» está bien probar con algo de Clowes o de Burns. Besos, moza.
perdida en la ciudad dice
Acabo de leer Maus, y pretendo comprar ahora Persépolis… (después de haber visto la película)… Así que creo que iré siguiendo la lista… jeje Gracias por las recomendaciones!!
Zalaya dice
Yo regale V de Vendetta a mi mejor amiga.
Me lo re-regaló, porque dijo que le gustó más la película.
Años intentando culturizarla…
Zalaya dice
Leñe!!!! ¿Has quitado la verificación de palabra?
Es por algo que he dicho?
Conner Kent dice
El diván de la psicóloga de Ralf Konig
Bonet dice
Airu !!!! Pronto, pronto os podré contar algo sobre el proyecto que tengo entre manos, a ver si lo tengo para el salón de Zaragoza City.
Saludos.